sábado, 10 de octubre de 2009

TU LUZ


Con el pensamiento frió de cada mañana
al amanecer busco la llegada de las respuestas a mis visiones
pero lejos o cerca lo único que puedo observar es
mi piel que ya dibuja los antaños recuerdos de la vida
que con nostalgia viven en mi pensamiento.

El anhelo por cambiar mis actuaciones de hemisferio
hacen que se desarrolle el temor por dar el salto
apostando a que pudiera tener un millón de oportunidades para lograrlo.

Recuerdo las palabras de la ciudad tan firmemente
que reconozco que no se puede colocar en una balanza
lo que se ha logrado o dejado de hacer por el ideal.

Navego únicamente por una pequeña luz y no por su alrededores
no me importa y no le doy valor al camino de como la obtuve
pero se que con esa luz
comienzo a vivir.